El prototipo de coche motor ultraliviano “Revolution” ha sido entregado al Centro de Tecnología Ferroviaria de Quinton en Long Marston, a donde el ensamblado final, la integración de los sistemas y las pruebas de performance van a ser realizadas a comienzos de 2021, antes de las demostraciones a potenciales promotores de proyectos ferroviarios y accionistas.
El proyecto “Revolution VLR” está siendo desarrollado por un consorcio liderado por Transport Design International y que reúne a la asociación de seguridad ferroviaria RSSB, a la empresa de leasing Eversholt Rail, al Warwick Manufacturing Group (que depende de la Universidad de Warwick), al constructor de vehículos autónomos RDM Group, al fabricante de motores Cummins y a Prose y Transcal Engineering.
El vehículo bidireccional de 18 metros de largo es una evolución de un coche motor ultraliviano que TDI y Severn Lamb entregaron en 2015 para transporte de empleados de una fábrica en una línea industrial en la ciudad turca de Konya.
El proyecto RVLR busca combinar las tecnologías ferroviarias y carreteras para proveer un vehículo “moderno, atractivo y con buena relación costo-beneficio” para ser utilizado en líneas cortas con bajo tráfico a donde la operación de trenes tradicionales o su conversión completa a tranvía moderno es antieconómica.
Está previsto que el coche motor Revolution pueda ser utilizado para mejorar servicios en ramales actualmente sub utilizados, para facilitar la reapertura de líneas abandonadas y para hacer viable la construcción de extensiones de líneas para mejorar la conectividad ferroviaria a zonas residenciales y de negocios. RSSB ha identificado 35 líneas que pueden ser viables para utilizar vehículos ultralivianos y varios operadores han expresado su interés.
El coche motor ha sido diseñado para minimizar el peso, y por ende los costos de infraestructura y operativos. Como resultado, su operación en líneas que son compartidas con vehículos ferroviarios convencionales va a necesitar procedimientos regulatorios específicos. El consorcio declaró a la revista Rail Business UK que, para la operación en vías compartidas, los peligros y riesgos resultantes deberán ser evaluados y mitigaciones operacionales y/o de ingeniería desarrolladas. “Desde nuestro punto de vista es difícil que estos vehículos sean prácticos para una línea con un alto nivel de servicio convencional, pero esas no son el objetivo del proyecto RVLR”, comentó un portavoz. “Para líneas con servicios modestos de pasajeros o carga, creemos que es posible llegar a una solución conveniente”.
Alguno de los miembros del consorcio están también involucrados en un proyecto separado apoyado por el Concejo de la Ciudad de Coventry que está desarrollando un tranvía prototipo ultraliviano de piso bajo.
Traducción: Entre Vías
Fuente: Railway Gazette International