VALÈNCIA. La multinacional Stadler Rail AG se ha adjudicado un nuevo macrocontrato ferroviario en el Reino Unido, y su filial española, la fábrica de trenes y locomotoras Stadler Rail Valencia, será la encargada de construir la mitad de las unidades.
Según informaba este lunes la compañía suiza, la firma galesa Wales & Borders le ha encargado 36 tranvías Citylink (cada una dotada con tres automóviles) y 35 trenes Flirt, lo que supone un total de 71 vehículos sobre los que Stadler no precisó la cantidad.
Preguntadas al respecto, fuentes oficiales de Stadler Valencia confirmaron a Valencia Plazaque las 36 unidades del tranvía Citylink serán diseñadas y fabricadas en Albuixech. En sintonía con la matriz, la filial valenciana también rehusó a concretar el importe del contrato.
El Citylink es el mismo modelo que el asignado para la renovación de seis unidades de la línea 9 del Tram de Alicante entre Benidorm y Dénia, un contrato de FGV que se adjudicó Stadler por 43,3 millones de euros (impuestos incluidos), a 7,2 millones la unidad.
No obstante, tanto el volumen de unidades solicitadas como las prestaciones de cada encargo pueden encarecer o abaratar significativamente la cantidad, haciendo difícil la comparación económica entre ambos pedidos.
Vuelve el tranvía a Cardiff
Según precisó Stadler Rail, los 36 tranvías Citylink operarán desde Cardiff hasta las ciudades de Treherbert, Aberdare y Merthyr Tydfil a partir de 2022, y supondrán el retorno de los trenes a pie de calle en la capital del país tras 70 años sin este medio de transporte.
Por su parte, las 35 unidades del tipo Flirt se fabricarán en otras plantas de Stadler. 11 serán operadas con diesel y se usarán en el sur del país, para los servicios de metro de Maesteg, Ebbw Vale y Cheltenham.
Las 24 unidades restantes serán trimodo, capaces de funcionar con diesel, tendido eléctrico o baterías. Se utilizarán en las rutas que unen el Valle de Glamorgan y destinos ubicados al norte de la ciudad de Cardiff.
Según Stadler, esta «electrificación inteligente» permitirá minimizar los costes de infraestructura, entre ellos la adecuación de los puentes por los que discurren las rutas. «La flota de Stadler supondrá para Gales más trenes nuevos y una gran mejora en la experiencia de los pasajeros», afirma la multinacional.