Los anuncios de mejora en la red de ferrocarriles de Huelva se suceden. Al mismo tiempo se proclaman y organizan movilizaciones ciudadanas, plataformas y protestas para reclamar nuevos y mejores servicios al Gobierno y a Renfe. Hace poco más de un mes se conocieron datos alarmantes sobre las incidencias, averías e impuntualidades que sufren los trenes con salida o destino Huelva y nos conectan con Jabugo, Zafra, Sevilla o Madrid. Entre el 1 de enero y el 12 de octubre de 2018 se contabilizaron más de un millar de incidentes de una y otra índole ferroviaria. Los nuevos datos obtenidos a partir de esa fecha y hasta el pasado 23 de noviembre aumentan más si cabe esas cifras que tanto preocupan a la ciudadanía y ahora a los partidos políticos metidos en faenas electorales.
Diariodehuelva.es ha tenido acceso a las nuevas estadísticas oficiosas que maneja Renfe para calcular sus índices de puntualidad. Y no son nada buenas. En total han circulado entre el 12 de octubre y el 23 de noviembre pasados 499 trenes, de los que 137 han sufrido incidencias, 312 han llegado a destino con puntualidad y 50 con adelantos. Mirando las estadísticas en conjunto hasta parecen aceptables en algunos casos. Pero si se analizan los trayectos concretos la cosa cambia.
El tren Huelva-Jabugo ha acumulado 68 trayectos en este tiempo. Ha sufrido 12 retrasos y 56 llegadas puntuales. Este servicio, a veces tan problemático en invierno y años lluviosos debido a los derrumbes en su trayecto serrano, ha mantenido unas ratios de puntualidad considerables, situándose en el 90% en octubre y el 76,32% en noviembre. La media pues alcanza el 82,35%.
Por la línea que circula entre Huelva y Sevilla han circulado entre el 12 de octubre y el 23 de noviembre 244 trenes. De ellos, 27 han llegado a término con retraso, 177 puntuales y 40 con adelanto sobre el horario previsto. El índice de puntualidad que barajan las estadísticas es en este caso del 88,93%.
El problema más grave y que ya ha costado varios ceses en el escalafón regional de Renfe (Extremadura y Sur) se presenta en las conexiones entre Huelva-Zafra-Madrid. Por este accidentado, criticado y polémico trayecto han circulado en este escaso mes y medio analizado 82 trenes. De ellos nada menos que 50 han llegado a su destino con retraso; 31 han sido puntuales en sus horarios establecidos y 1 ha llegado incluso con adelanto. El índice de puntualidad que presenta este trayecto es muy bajo, situándose en un ridículo 31,50% en octubre y un 45,45% en noviembre. Lo que hace una media del 39,02%.
El último trayecto analizado es el tren estrella para el turismo, según asegura el sector empresarial y turístico. La conexión con Madrid. Se realiza a través de los trenes Alvia y los Intercity que conectan con la capital de España vía Sevilla. En total han circulado 105 convoyes. De ellos 48 han llegado con retraso y otros 48 con puntualidad y 9 adelantados. La media de puntualidad llega en este caso al 66,67% en octubre y el 42,59% en noviembre, una media ponderada del 54,29%.
Pero qué ocurre para que se produzcan estos altibajos, incidencias, faltas de puntualidad e interrupciones en el servicio ferroviario. El sindicato CGT lo tiene claro: los recortes y la mala gestión lastran el servicio y a su juicio lo que tenía que haber sido una apuesta del Gobierno por el ferrocarril convencional, cercanías y la media distancia se ha convertido en un verdadero problema. Prima el AVE y por eso se han dejado colapsar el resto de infraestructuras.
La odisea de los maquinistas
Detrás de este asunto se encuentran detalles que pasan desapercibidos para el usuario. Como por ejemplo que un maquinista tenga que llegar de Córdoba a Madrid, coger un taxi trasladarse de estación y esperar que se solucione allí el colapso de tráfico ferroviario existente a esa hora para conducir un convoy dirección Huelva. Este es uno de los motivos por el que casi siempre llegan con retrasos los trenes vía Extremadura y destino Huelva.
Por no hablar de la maquinaria de segunda o tercera mano que han enviado a Huelva, por ejemplo, desde Navarra para realizar desde hace años los trayectos Huelva-Madrid.
Otra cuestión son los horarios impuestos desde la Dirección de la Red de Ferrocarriles. El sindicato CGT tiene claro que, por ejemplo, el tren Huelva-Sevilla y viceversa ha sido una de las víctimas de lo que llaman “horarios perversos”. Es decir, por ahorrarse un maquinista y un revisor programan unos horarios nada útiles para los ciudadanos que poco a poco van abandonando el tren y optan por otros medios de transportes para llegar a Sevilla o a Huelva.
Con los horarios de hace unos años era posible ir a Sevilla a trabajar o a Huelva y regresar en un horario laboral aceptable, ahora sencillamente es casi imposible. El tren parte de Huelva a Sevilla a las 6.55 horas y regresa a las 10.00 horas para que el mismo maquinista realice el trayecto. O vuelves en el tren de las 10.00 horas o hay que esperar hasta las 5 de la tarde más las horas de trayecto. CGT advierte que Renfe ha diseñado los horarios de los trenes a Huelva en función de sus necesidades como empresa en vez de ser útil a los viajeros, ciudadanos y trabajadores.
Desde el sindicato recuerdan que han presentado alternativas y propuestas para mejorar esta situación que han sido rechazadas por los sucesivos gobiernos. Hasta entienden que con una inversión de 250.000 euros se podrían aumentar el flujo ferroviario a Sevilla y Huelva en nueve trenes. Y eso sin citar otra de sus propuestas desechadas, la creación de una línea que una con Mazagón aprovechando la ya existente que va hasta el Polo Químico. Medidas todas ellas que no han ido a ninguna parte.
El servicio ferroviario languidece en una provincia que llegó a ser líder en ferrocarriles teniendo en cuenta las líneas Huelva-Zafra y Huelva-Ayamonte, la primera en desuso y la segunda finiquitada en la década de 1980. Por no citar las líneas de mercancías que apenas tienen trasiego. Todo el mineral que sale de las minas de Aguas Teñidas y del Proyecto Río Tinto es transportado hasta el Puerto de Huelva en camiones, aumentando la inseguridad en las carreteras convencionales y añadiendo riesgos medioambientales y de salud al atravesar algunos cascos urbanos de pequeños municipios.
Fuente: diariohueva.es